8 feb 2015

La vida de horror de Poe


"No es de extrañar que su literatura fuera tan oscura cuando sabemos que fue educado en un cementerio. De hecho, aprendió a sumar y restar con los números de las lápidas para calcular los años a los que habían muerto unos u otros. Las clases de gimnasia eran aún más demoledoras: al empezar el colegio se le entregaba a cada alumno una pala; si moría algún miembro de la parroquia, los niños cavaban la tumba. Esa era su fórmula para hacer ejercicio vigorizante…"

Tomado de Factoría de Autores 

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