2 ene 2015

Aduanas tras la cortina de hierro

García Márquez, en 1957 talvez, pasaba de Polonia a Checoslovaquia, y le sobraban doscientos zlotis que no podía sacarlos de Polonia. Decidió comprar doscientas cajetillas de cigarrillos; las primeras veinte tuvo que pagarlas al guardia polaco, 'por derechos de exportación'. Pero al ingresar tampoco tuvo el dinero checo para 'los derechos de importación', así que tuvo que ceder las ciento ochenta cajetillas restantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario